viernes, 25 de febrero de 2011

La gente grita y no sabe gritar deja sus ojos medio abiertos y abren sus falanges para apuntar y dirigir el grito a la nada : ¿a la máquina expendedora de cigarros?, ¿a la multitud que grita también con sus dedos índices como lanzas a sus espaldas?, ¿a su este a su sol o a la penumbra del oeste?, al cielo a un pájaro que da círculos en su cabeza como aureola esperando su muerte cerebral, tiene tanto que juzgar y solo dos manos para apuntar.

1 comentario: